Guía de alimentación y nutrición para gatitos
El rápido crecimiento, descubrimiento y desarrollo resumen los primeros meses de vida de tu gatito. Es esencial que sepas cómo alimentar a tu gatito desde el principio para favorecer su crecimiento saludable. Durante su primer año, verás como tu nueva mascota pasa de ser un gatito pequeño y frágil a un gato adulto joven, independiente y curioso. La mayoría de las razas de gatos alcanzan la edad adulta a alrededor de los 12 meses, pero algunas demoran más: los gatos de raza Maine Coon, por ejemplo, lo hacen a los 15 meses. Desde el punto de vista nutricional, el primer año es una etapa delicada en la vida de un gato.
Mientras su estructura ósea se hace gradualmente más fuerte y su cerebro madura a un ritmo increíble, necesitan energía, proteínas y otros nutrientes. Elegir un alimento que proporcione el equilibrio adecuado de todos ellos favorecerá el desarrollo de tu gatito y lo preparará para una vida larga y saludable.
Gatitos y gatos adultos: diferencias en las necesidades nutricionales
Las necesidades nutricionales de los gatitos son muy distintas de las de los gatos adultos (y completamente diferentes de las de los humanos). Su alimentación debe contener más energía y proteínas que la de los gatos adultos, para favorecer el crecimiento óseo y muscular, así como suficientes antioxidantes para ayudarlos a reforzar su inmunidad. Mientras exploran, juegan y, sobre todo, crecen, los gatitos necesitan alimentos adaptados a su diminuto tamaño, pero que les aporten el equilibrio adecuado de nutrientes para favorecer su desarrollo. Aunque las necesidades nutricionales de los gatitos pueden variar de una raza a otra, como tutor de un animal de compañía, también conocerás las necesidades únicas de tu propio gatito.
La base del crecimiento: ¿por qué es tan importante la nutrición de tu gatito?
Desde afuera puede parecer que todo son juegos, siestas y mimos, pero tu nueva mascota está atravesando un período de intenso crecimiento. Es importante que la alimentación de tu gatito esté a la altura de su desarrollo. Al fin y al cabo, el miembro más pequeño y nuevo de la casa tiene una lista impresionante de necesidades nutricionales. Su alimentación debe ser adecuada para su frágil sistema digestivo y adaptarse a su mandibula y sus dientes diminutos. Un alimento que carezca de los nutrientes específicos en las cantidades óptimas puede afectar a su desarrollo. Por ejemplo, los gatitos necesitan proteínas para el crecimiento de los músculos y el esqueleto. Una alimentación insuficiente puede causarles problemas articulares y óseos en el futuro. Aunque al nacer los gatitos están protegidos por la inmunidad de su madre, esta protección desaparece y su alimentación debe contener antioxidantes que contribuyan al fortalecimiento de su propio sistema inmunitario inmaduro, sobre todo en el periodo anterior a la vacunación.
¿Cómo es un desarrollo saludable?
Aunque para todos los gatitos el ritmo de crecimiento es intenso en los primeros meses de vida, ese crecimiento difiere de una raza a otra. La mayoría de los gatos alcanzaran la edad adulta entre los 12 y los 15 meses de edad. Pero el diminuto Singapura (la raza de gato más pequeña reconocida) no tendrá las mismas necesidades nutricionales en la misma etapa que sus primos Maine Coon o Persa, más imponentes. Es importante consultar una tabla que brinde orientación sobre la alimentación de los gatitos por edad y raza, y es una buena idea conversarlo con tu veterinario para que te de consejos sobre alimentación adaptada a tu gato. Así, estarás seguro de que la alimentación de tu gatito incluye el soporte adecuado para su rápido desarrollo.
Del nacimiento a los 4 meses
A esta temprana edad, tu gatito crece a la velocidad del rayo. Un gatito de una semana acaba de abrir los ojos. Gracias al calostro que le brinda su madre, que refuerza su sistema inmunitario, y a la leche, aumenta 10 y 30 g de peso al día. Al mes de vida, ese pequeño gatito indefenso ya se ha transformado en un explorador curioso y juguetón, aunque diminuto. Estará listo para empezar el destete, un proceso vital en el que el gatito pasa de depender totalmente de su madre para sus necesidades nutricionales a ser independiente. El proceso de destete suele completarse en torno a los dos meses. Su primer alimento debe ser blando, para facilitar la transición de la leche al alimento sólido, y aportar suficientes antioxidantes necesarios para reforzar su inmunidad, así como de aminoácidos para favorecer el crecimiento muscular y celular.
De 4 a 12 meses
Tu gatito sigue creciendo y está desarrollando músculos y huesos fuertes. El crecimiento es más intenso en torno a los cuatro o cinco meses, cuando tu gatito podría aumentar unos 100 g por semana. Necesitan un alimento con mayor densidad energética - que contenga más calorías por gramo- que los gatos adultos. Pero, al principio, debe ser un alimento adaptado a sus pequeñas mandíbulas mientras esperan la aparición de sus dientes permanentes. Hay que vigilar de cerca el tamaño de las raciones para garantizar que tu gatito no aumente excesivamente de peso durante esta etapa de crecimiento. A esta edad, los gatitos están ocupados jugando y perfeccionando sus habilidades sociales. Durante este periodo, tu gato atravesará la pubertad y es posible que notes que empieza a comportarse más como un gato adulto. Esto puede incluir dormir entre 13 y 16 horas al día. Todo ese crecimiento, desarrollo y socialización es un trabajo agotador.
Gatos adultos
Cuando tu mascota tenga alrededor de un año, se despedirá de la etapa de gatito y se asentará en la vida como un gato adulto. Su mandibula y dientes ya estan preparados para recibir alimento de adulto. Es importante que pidas ayuda a tu veterinario para manejar esa transición. El alimento de tu gato ya no tiene que ser tan energético, pero sigue necesitando nutrientes esenciales como aminoácidos, incluyendo taurina, y vitaminas A y D. Tendrás que decidir si le ofreces alimento húmedo o seco (o ambos) y elegir el alimento adecuado para él, teniendo en cuenta su estilo de vida y su nivel de actividad. Alimentar a tu gato con las cantidades correctas es importante para evitar un aumento excesivo de peso.
Del nacimiento a los 4 meses
A esta temprana edad, tu gatito crece a la velocidad del rayo. Un gatito de una semana acaba de abrir los ojos. Gracias al calostro que le brinda su madre, que refuerza su sistema inmunitario, y a la leche, aumenta 10 y 30 g de peso al día. Al mes de vida, ese pequeño gatito indefenso ya se ha transformado en un explorador curioso y juguetón, aunque diminuto. Estará listo para empezar el destete, un proceso vital en el que el gatito pasa de depender totalmente de su madre para sus necesidades nutricionales a ser independiente. El proceso de destete suele completarse en torno a los dos meses. Su primer alimento debe ser blando, para facilitar la transición de la leche al alimento sólido, y aportar suficientes antioxidantes necesarios para reforzar su inmunidad, así como de aminoácidos para favorecer el crecimiento muscular y celular.
De 4 a 12 meses
Tu gatito sigue creciendo y está desarrollando músculos y huesos fuertes. El crecimiento es más intenso en torno a los cuatro o cinco meses, cuando tu gatito podría aumentar unos 100 g por semana. Necesitan un alimento con mayor densidad energética - que contenga más calorías por gramo- que los gatos adultos. Pero, al principio, debe ser un alimento adaptado a sus pequeñas mandíbulas mientras esperan la aparición de sus dientes permanentes. Hay que vigilar de cerca el tamaño de las raciones para garantizar que tu gatito no aumente excesivamente de peso durante esta etapa de crecimiento. A esta edad, los gatitos están ocupados jugando y perfeccionando sus habilidades sociales. Durante este periodo, tu gato atravesará la pubertad y es posible que notes que empieza a comportarse más como un gato adulto. Esto puede incluir dormir entre 13 y 16 horas al día. Todo ese crecimiento, desarrollo y socialización es un trabajo agotador.
Gatos adultos
Cuando tu mascota tenga alrededor de un año, se despedirá de la etapa de gatito y se asentará en la vida como un gato adulto. Su mandibula y dientes ya estan preparados para recibir alimento de adulto. Es importante que pidas ayuda a tu veterinario para manejar esa transición. El alimento de tu gato ya no tiene que ser tan energético, pero sigue necesitando nutrientes esenciales como aminoácidos, incluyendo taurina, y vitaminas A y D. Tendrás que decidir si le ofreces alimento húmedo o seco (o ambos) y elegir el alimento adecuado para él, teniendo en cuenta su estilo de vida y su nivel de actividad. Alimentar a tu gato con las cantidades correctas es importante para evitar un aumento excesivo de peso.
¿Debo alimentar a mi gatito con alimento húmedo o seco?
¿Qué alimento debo ofrecer a mi gatito?
Una de las grandes preguntas que te plantearás como nuevo tutor será que alimento ofrecer a tu gatito. El alimento húmedo contribuye a la ingesta de agua de tu gato y tiene un fuerte aroma que puede tentar a los gatos con apetito más quisquilloso a acercarse a su fuente de alimento. Los gatos son más sensibles al olfato que al gusto. Por otra parte, el alimento seco se conserva en el comedero por más tiempo, por lo que permite fomentar el instinto natural de los gatos de comer pequeñas porciones de alimento en el día, o tambien facilita el uso de comederos interactivos en gatos que tienden a ser más glotones.
La textura de las croquetas tiene otro beneficio para tu gato
Actúa de forma muy parecida a un cepillo de dientes, eliminando suavemente la placa bacteriana y evitando así la formación de sarro. En cuanto al momento en que tu gatito puede comer alimento seco, las pequeñas croquetas rehidratables diseñadas para gatitos son adecuadas a partir del mes de edad, cuando comienza el proceso de destete. Una vez que hayas investigado, podrás llegar a la conclusión de que la solución ideal es una combinación de las dos texturas, alternando alimento seco y húmedo, u ofreciéndole ambos al mismo tiempo (pero no en el mismo comedero, ya que el alimento húmedo empapa las croquetas si tu gato no las come de forma inmediata), respetando las raciones diarias recomednadas para ambos alimentos.
Manejo de la transición
En cualquier caso, hay que introducir el nuevo alimento de tu gato de forma gradual para evitar trastornos digestivos. Los gatos pueden ser sensibles a los cambios en su alimentación y una transición lenta servirá para evitar cualquier problema. Los gatitos suelen tomar leche materna en sus primeras semanas de vida, por lo que un sustituto lácteo especialmente formulado para ellos puede desempeñar un papel nutricional importante si esto no es posible. Pero los gatitos no deben tomar leche de vaca (tampoco los gatos adultos) ya que son incapaces de digerirla y puede provocarles diarrea.
ROYAL CANIN® La ciencia detrás de la nutrición de los gatitos
Nos especializamos en la salud a través de la nutrición, adaptada a las necesidades específicas de cada gatito. Para nosotros, la alimentación de tu gatito no consiste solo en fortalecer su cuerpo y proporcionarle energía, sino también apoyar sus necesidades únicas. Proporcionamos un equilibrio óptimo de nutrientes para favorecer las defensas frente a las enfermedades, así como la energía, el crecimiento celular y el mantenimiento.
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Es una buena idea saber cuánto alimentar a tu gatito antes de que llegue a tu hogar. La cantidad dependerá de la raza, edad y su etapa de desarrollo. Cuando hayas calculado cuanto debe comer, pesá su ración diaria. Si te preguntás cuántas veces al día se debe alimentar a tu gatito... puede que sea él quien decida. Los gatos "picotean" el alimento por naturaleza y, en ocasiones, son capaces de regular su propia ingesta mediante varias comidas pequeñas al día. Aunque esto no es así para todos los gatos, si es el caso del tuyo, brindale un comedero con el alimento adecuado (que no supere su ración diaria total) y permitile fomentar su instinto natural.
A partir de aproximadamente el mes de edad, comienza el proceso vital de destete del gatito, que suele completarse alrededor de los dos meses. Entre los cuatro y los doce meses, como el cuerpo del gatito se desarrolla rápidamente, su alimentación debe aportar mucha energía para favorecer su crecimiento. Una vez que el gatito ha alcanzado la edad adulta, normalmente alrededor de un año (aunque depende de la raza), ya no se centra en el crecimiento intenso, pero su alimentación debe seguir aportando los nutrientes que necesita para mantener la salud, adaptados a su raza, edad y estilo de vida.
Crear un entorno adecuado para la alimentación del gatito
Los gatos pueden ser sensibles al alimento, no solo a lo que comen, sino también a las condiciones en que lo hacen. Procurá crear un espacio para que pueda alimentarse de forma tranquila y sin molestias. Debe estar fuera de la vista y con una vía de escape fácil. No es de extrañar que prefieran que el comedero esté lejos de la bandeja sanitaria, pero también debés mantener separados el comedero del bebedero de tu gatito para evitar que el alimento caiga al agua. Lo ideal es que el espacio de alimentación de tu gatito no esté dentro de tu propia zona de comedor. No es buena idea que los gatos ingieran alimentos para humanos: sus sistemas digestivos son diferentes y los alimentos para humanos pueden perjudicar su salud. Mantener las dos zonas separadas reducirá la tentación de ofrecerles las sobras de tu mesa.
¿Cuánto debe beber tu gatito?
Los gatitos deben beber unos 60 ml por kg de peso corporal, pero no hace falta que saques un vaso medidor: parte de ese liquido procede del alimento de tu gatito y necesitará beber más o menos dependiendo de si consume alimento seco o húmedo. La temperatura, el nivel de actividad del gatito y su estado físico general también influirán en sus necesidades de agua. Asegurate de que siempre disponga de agua fresca y limpia, de ser posible en varios lugares tranquilos de la casa. Hay que reponerla al menos una vez al día. Los bebederos deben lavarse con regularidad para evitar la proliferación de gérmenes. Lo mejor son los platos de cristal, porcelana o metálicos: algunos gatitos pueden no acercarse por el olor de un comedero de plástico.
La alimentación de tu gatito es la base de un crecimiento saludable, por eso es tan importante que sea la adecuada desde el principio. Cuando estés seguro de que tu gatito consume el alimento específico con los nutrientes apropiados para su raza y etapa de vida, podrás relajarte y disfrutar de esta emocionante etapa de la vida de tu mascota.
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