Prepararse para la primera consulta veterinaria de tu gatito

10/2/2018
Puede que ya estés acostumbrado al proceso de llevar mascotas al veterinario, pero si no es así, vale la pena que dediques un tiempo a comprender el proceso y cómo asegurarte de que tu gatito esté lo más cómodo posible en todo momento.
Kitten cat sitting down on an examination table being checked over by a vet.

Puede que ya estés acostumbrado al proceso de llevar mascotas al veterinario, pero si no es así, vale la pena que dediques un tiempo a comprender el proceso y cómo asegurarte de que tu gatito esté lo más cómodo posible en todo momento.

Instrucciones para elegir el veterinario de tu gatito

Es posible que cuando recibiste a tu gatito te hayan recomendado que siguieras llevándolo al mismo veterinario. Si esto no es posible, por cualquier motivo, debes elegir una clínica para tu mascota.

Algunos factores que debes considerar para elegir una nueva clínica veterinaria son los siguientes:

  • La reputación local de la clínica
  • La cercanía a tu casa
  • Cómo llegar allá
  • Si puedes estacionar fácilmente
  • Si la clínica está limpia y bien mantenida
  • Si los archivos de las mascotas se mantienen actualizados
  • Si envían recordatorios de las vacunas en los controles de salud
  • Qué programas de medicina preventiva han implementado
  • El nivel y la gama de equipos que tienen
  • Cómo organizan los servicios de emergencia o fuera del horario normal
  • Si ofrecen consejos nutricionales para tu mascota
  • Si el enfoque es adecuado para las necesidades de tu gato

Desde hace algún tiempo, los profesionales que son conscientes de las necesidades especiales de los gatos han adoptado un enfoque "amigable para los gatos". Estas clínicas están diseñadas en función de las necesidades de los gatos, con horarios de cirugías o áreas de espera especiales solo para gatos. Hay dispensadores de feromonas calmantes, iluminación difusa, un ambiente tranquilo y un enfoque especialmente paciente y atento. Todos estos elementos permiten a los veterinarios, dueños y gatos realizar consultas o recibir atención en las mejores condiciones.

Cuando los gatos son realmente poco cooperativos, o quizás incluso agresivos, durante las visitas al veterinario es porque están asustados y no tienen otra forma de responder a las "amenazas" de las que se sienten víctimas.

Qué hacer antes de llevar a tu gatito al veterinario

Tu veterinario considerará tu información, como dueño del gato, tremendamente útil para decidir qué vacunas son necesarias.

Antes de realizar la visita, revisa el libro de registro de salud de tu gato. Puede ser útil anotar cierta información, como la dieta del gato (marca, cantidad, etc.), hábitos de consumo de agua, ambiente y si has notado algún cambio en la alimentación, en su digestión o su conducta.

Mantener un registro escrito del historial de salud de tu gato y los tratamientos anteriores puede ser muy valioso. Idealmente, mantenlo en su carpeta de salud.

Transporte de tu gatito al veterinario

Por razones de seguridad, tu gato debe viajar en una jaula para vehículos diseñada especialmente con ese propósito. Lo ideal es que tu gatito ya la conozca. Para facilitar las cosas, si planeas ir pronto al veterinario, deja la jaula varios días antes de la consulta abierta en un rincón de la casa donde le guste ir a tu gatito.

Puedes rociar feromonas calmantes y colocar una manta en el interior que ya tenga el aroma del gato. Esto ayudará a que tu gatito se acostumbre a la jaula y a que se sienta seguro, protegido de miradas indiscretas. Si la jaula tiene un lado abierto, cúbrela con una manta o toalla para que quede menos expuesta.

Cómo controlar a tu gatito en el veterinario

Para que las visitas al veterinario tengan el menor impacto posible, puedes seguir algunos de estos consejos útiles:

  • En la sala de espera, deja a tu gato en su canasta y colócala en una superficie elevada, como una silla.
  • Trata de no hacer movimientos bruscos y saca a tu gato suavemente para ponerlo en la mesa de examinación.
  • Algunos gatos se sienten tranquilos en su jaula. Si este es el caso, retira la parte superior para que el veterinario pueda alcanzar al animal.
  • Habla con tu gato con una voz suave y mantén la calma. Si estás agitado, tu gato lo sentirá y se estresará todavía más.
  • Puedes confiar en los profesionales: tu equipo veterinario está acostumbrado a tratar con gatos, incluso con los que no cooperan. Si intentas intervenir, no solo estorbarás, sino que podrías salir lastimado.
  • Algunos veterinarios hacen visitas a domicilio. En este caso, encierra al gato en una habitación, preferiblemente una que no tenga muchos escondites. Recuerda que para algunas visitas tendrás que ir hasta allá con tu gato.
  • Un gato asustado puede empeorar una enfermedad, especialmente si tiene problemas respiratorios o si ha sufrido un accidente. Lo mejor en estos casos es mantener la calma y tranquilizar a tu gato con caricias y una voz suave.
  • Si tu gato necesita ser hospitalizado, elige un lugar que tenga en cuenta sus necesidades específicas, si es posible. Si la visita se planificó con anticipación, por lo general, puedes llevar el cojín de tu gato o su manta favorita, o incluso una prenda de vestir que hayas usado que esté impregnada de tu olor.
Kitten cat sitting down on an examination table being checked over by a vet.

De vuelta a casa del veterinario

La mayoría de las veces, los gatos están fascinados de estar de vuelta en su entorno familiar. Cuando vuelvas de la clínica veterinaria, deja que tu gato se acomode tranquilamente.

Los gatos (si están lo suficientemente sanos para hacerlo) seguramente querrán asegurarse de que los muebles no se hayan movido, que el jardín aún esté allí y que la caja de arena sea la suya.

Muy a menudo inspeccionarán sus lugares favoritos y depositarán su olor frotándose la frente o afilándose las garras.

Sin embargo, en hogares con varios gatos, deberás tomar algunas precauciones para tener un regreso feliz y sereno a la comunidad felina.

Volver a presentar tu gatito a otras mascotas

En grupos bien establecidos de gatos, cada uno conoce a los otros y han intercambiado regularmente firmas olfativas.

Puede suceder que un gato abandone el grupo temporalmente y, cuando regresa a la casa, ya no es reconocido por uno o todos sus compañeros, lo que puede causar ansiedad o incluso peleas.

Por lo tanto, es necesario tomar ciertas precauciones cuando el viajero regrese a casa nuevamente.

Estas precauciones también se pueden usar cuando se introduce un recién llegado, sea cual sea su especie:

  • Primero debes asegurarte de que la atmósfera en la casa sea pacífica, rociando feromonas sintéticas.
  • Para que el recién llegado tenga un olor "local", puedes frotarlo con un paño con el olor de un gato que no haya salido de la casa.
  • Si es posible, coloca en la caja de transporte una funda que hayan usando gatos que no se han movido, de modo que el gato que llega a casa reconozca el olor de sus compañeros.

Un encuentro estresante antes, durante o después de una visita al veterinario puede dejar una impresión duradera en tu gatito y hacerlo más reticente a las citas en el futuro.

Dar estos sencillos pasos para garantizar que este proceso sea tranquilo y relajado significará que tu gato se sienta más cómodo y seguro al visitar al veterinario cuando sea adulto.

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