Foco en el pelo felino: razas de gatos que no mudan mucho
¿Sabes por qué muda tu gato?
Comprender el proceso de muda de tu gato
Fase anágena
La fase anágena es el período de crecimiento activo de los folículos pilosos. Durante esta fase, los pelos nuevos expulsan a los viejos y provocan su caída.
Fase catágena
La fase catágena es una fase de transición en la que los folículos pilosos se encogen y el crecimiento del pelo es más lento. El pelo viejo se desprende del folículo, pero permanece en su lugar.
Fase telógena
La fase telógena es cuando el pelo viejo se cae y empieza a crecer pelo nuevo en su lugar. La muda es más notoria durante esta fase.
El proceso de muda suele ser un ciclo continuo, con pelos individuales en diferentes fases de crecimiento.
Factores clave que afectan la muda de pelo de tu gato
Las diferentes razas de gatos tienen distintas cantidades y texturas de pelaje. Algunas razas de gatos exhiben patrones de muda distintos. Por ejemplo, se sabe que las razas de pelo largo, como el Maine Coon, pierden pelo de forma más abundante y frecuente debido a su abundante pelaje. Por otro lado, las razas de pelo corto, como el siamés y el bengalí, mudan con menos frecuencia y suelen tener pelajes más finos.
Los gatos son muy sensibles a los cambios de luz diurna y temperatura. Los cambios estacionales, como el aumento de las horas de luz y un clima más cálido, provocan la caída de pelo como preparación para un nuevo pelaje. La temporada de muda de pelo de los gatos generalmente ocurre durante los meses de primavera y otoño. Los gatos mudan más pelo en primavera para dar paso a pelajes nuevos y más ligeros, mientras que en otoño mudan pelo viejo para dejar espacio a su pelaje de invierno.
La salud y la dieta generales de un gato pueden afectar la calidad de su pelaje y sus patrones de muda. Las deficiencias nutricionales, las alergias y ciertas afecciones médicas, como el hipertiroidismo, pueden provocar una muda excesiva o un mal estado del pelaje.
Se sabe que los gatos mudan más cuando están estresados o ansiosos. Los cambios ambientales, como la mudanza a una nueva casa o la introducción de una nueva mascota, pueden contribuir a aumentar la pérdida de pelo.
Los gatos pasan gran parte del día acicalándose y esta actividad elimina el pelo suelto. El acicalamiento excesivo como resultado del estrés o como respuesta a parásitos, como pulgas o piojos, puede provocar una mayor caída del pelo. La artrosis, por otro lado, que a menudo se asocia con el envejecimiento, puede provocar una menor actividad de acicalamiento, acumulación de pelo suelto y aumento de la caída.
Consejos de acicalamiento para crear un vínculo con tu gato
¿Por qué acicalar?
Cepillar el pelo del gato no solo elimina el pelo suelto, sino que también masajea la piel y distribuye los aceites naturales por el pelo para mantenerlo limpio y brillante. Según International Cat Care, una organización benéfica respetada y de larga data dedicada a mejorar el bienestar mundial de los gatos, el acicalamiento desempeña otras funciones importantes. Estas funciones incluyen regular la temperatura corporal, mantener el pelaje impermeable y eliminar los parásitos externos, como las pulgas.
El sebo de los aceites naturales produce vitamina D cuando se expone a la luz solar y tu gato la ingiere cuando se acicala. Acicalar a tu gato le ayuda en estas funciones vitales y también puede ayudar a minimizar el desarrollo de bolas del pelo suelto que podría tragar.
Algunos gatos, especialmente los de pelo largo, pueden requerir un acicalamiento profesional. Un peluquero profesional puede recortar el pelo y las uñas, arreglar los tonos mate y cepillar y limpiar a fondo a tu gato. No dudes en consultar a tu veterinario o a un peluquero profesional para obtener orientación específica sobre las técnicas y los productos de acicalamiento adecuados para la raza y las necesidades individuales de tu gato.
Las sesiones de acicalamiento deben ser una experiencia positiva tanto para tu gato como para ti. Tómate tu tiempo, sé amable y recompensa a tu gato con elogios o premios para que el acicalamiento sea una experiencia de unión. Por supuesto, si usas premios, ten en cuenta estas calorías ajustando las porciones de comida de tu gato para mantener un equilibrio calórico diario saludable.
El cepillado regular con un cepillo de cerdas suaves o un guante de acicalamiento elimina el pelo suelto, evita que se enrede y estimula la piel para promover un pelaje saludable. Cepillar suavemente a tu gato es como darle un masaje. Es una forma estupenda de pasar tiempo juntos y una maravillosa experiencia de unión para los dos.
Los gatos de pelo largo pueden necesitar un cepillado diario, mientras que los de pelo corto pueden cepillarse unas cuantas veces a la semana. Utiliza un cepillo o peine adecuado en función de la longitud y la textura del pelaje de tu gato. Empieza por la cabeza y cepilla hacia la cola siguiendo la dirección del crecimiento del pelo. Haz que las sesiones sean cortas para empezar y termina antes de que tu gato muestre algún signo de malestar o impaciencia. Como siempre, asegúrate de que tu gato se acostumbre a que lo cepillen desde el principio y de forma positiva.
¿Deberías bañar a tu gato? Por lo general, los gatos son quisquillosos y no es necesario ni recomendable bañarlos. Sin embargo, es posible bañarlos de vez en cuando para ayudar a reducir la caída de pelo y mantener su pelaje limpio.
Si decides bañar a tu gato, es esencial introducirlo en el agua gradualmente y darle tiempo para que se habitúe a estar dentro y alrededor del agua. Usa un champú adecuado para gatos y asegúrate de que haya un ambiente amable y tranquilo durante el proceso de baño. Presta atención a su lenguaje corporal y no insistas si parece incómodo o ansioso.
O, en lugar de un baño, puedes utilizar un paño húmedo para pasar una esponja por su pelaje. La mayoría de los gatos tolerarán esto antes que un baño.
Como parte del proceso de acicalamiento de tu gato, revisa regularmente las uñas, las orejas y los dientes de tu gato. Córtate las uñas largas, limpia las orejas sucias y realiza un cuidado dental adecuado. Tu veterinario puede enseñarte a realizar un cuidado dental regular en casa utilizando pasta dentífrica específica para gatos y un cepillo de dientes suave o un cepillado de dedos. Además, puedes darle a tu gato juguetes que promuevan la higiene bucal o incluso un alimento dental recomendado por tu veterinario.
Para la acumulación de cera en las orejas de tu gato, el veterinario puede recomendarte una solución limpiadora de oídos especializada para limpiar suavemente la parte externa del oído. Evita insertar cualquier cosa en el canal auditivo, ya que puede causar daños.
Recortar regularmente las uñas de los gatos mayores y de los gatos a los que no les gusta usar rascadores puede prevenir las dolorosas uñas encarnadas. Usa un cortaúñas específico para gatos o pide ayuda a tu veterinario o peluquero profesional si no estás seguro del proceso.
El cepillado regular con un cepillo de cerdas suaves o un guante de acicalamiento elimina el pelo suelto, evita que se enrede y estimula la piel para promover un pelaje saludable. Cepillar suavemente a tu gato es como darle un masaje. Es una forma estupenda de pasar tiempo juntos y una maravillosa experiencia de unión para los dos.
Los gatos de pelo largo pueden necesitar un cepillado diario, mientras que los de pelo corto pueden cepillarse unas cuantas veces a la semana. Utiliza un cepillo o peine adecuado en función de la longitud y la textura del pelaje de tu gato. Empieza por la cabeza y cepilla hacia la cola siguiendo la dirección del crecimiento del pelo. Haz que las sesiones sean cortas para empezar y termina antes de que tu gato muestre algún signo de malestar o impaciencia. Como siempre, asegúrate de que tu gato se acostumbre a que lo cepillen desde el principio y de forma positiva.
¿Deberías bañar a tu gato? Por lo general, los gatos son quisquillosos y no es necesario ni recomendable bañarlos. Sin embargo, es posible bañarlos de vez en cuando para ayudar a reducir la caída de pelo y mantener su pelaje limpio.
Si decides bañar a tu gato, es esencial introducirlo en el agua gradualmente y darle tiempo para que se habitúe a estar dentro y alrededor del agua. Usa un champú adecuado para gatos y asegúrate de que haya un ambiente amable y tranquilo durante el proceso de baño. Presta atención a su lenguaje corporal y no insistas si parece incómodo o ansioso.
O, en lugar de un baño, puedes utilizar un paño húmedo para pasar una esponja por su pelaje. La mayoría de los gatos tolerarán esto antes que un baño.
Como parte del proceso de acicalamiento de tu gato, revisa regularmente las uñas, las orejas y los dientes de tu gato. Córtate las uñas largas, limpia las orejas sucias y realiza un cuidado dental adecuado. Tu veterinario puede enseñarte a realizar un cuidado dental regular en casa utilizando pasta dentífrica específica para gatos y un cepillo de dientes suave o un cepillado de dedos. Además, puedes darle a tu gato juguetes que promuevan la higiene bucal o incluso un alimento dental recomendado por tu veterinario.
Para la acumulación de cera en las orejas de tu gato, el veterinario puede recomendarte una solución limpiadora de oídos especializada para limpiar suavemente la parte externa del oído. Evita insertar cualquier cosa en el canal auditivo, ya que puede causar daños.
Recortar regularmente las uñas de los gatos mayores y de los gatos a los que no les gusta usar rascadores puede prevenir las dolorosas uñas encarnadas. Usa un cortaúñas específico para gatos o pide ayuda a tu veterinario o peluquero profesional si no estás seguro del proceso.
Razas de gatos con poca muda
No existen verdaderas razas de gatos que no suelten pelo. Sin embargo, aunque perder pelo es una parte natural de la vida de un gato, hay razas que pierden menos pelo que otras. Estas razas son una buena opción si buscas gatos con una pérdida mínima de pelo. Algunas de estas razas de gatos que pierden menos pelo se denominan "razas hipoalergénicas" porque producen menos alérgenos y un pelaje que pierde menos pelo.
Como nota al margen, es importante tener en cuenta que no es el pelo de gato lo que provoca estornudos, picazón y malestar en las personas que sufren de alergias. La saliva de los gatos contiene un alérgeno, una proteína llamada Fel d1. Este alérgeno también se encuentra en la caspa (o piel muerta) y en las glándulas sebáceas. Cuando un gato se lame el pelaje, la saliva se seca y el alérgeno de la saliva se transporta por el aire. Cualquier persona sensible a la proteína Fel d1 que entre en contacto con el alérgeno (acariciando el pelaje de un gato o simplemente por entrar en la misma habitación) reaccionará con estornudos y picazón. Algunas razas de gatos producen menos proteína Fel d1 y se denominan razas hipoalergénicas o de baja alergia.
También es importante recordar que, si bien ciertas razas pueden asociarse a una menor pérdida de pelo, los gatos individuales de esas razas pueden seguir teniendo variaciones en sus patrones de muda. Factores como la genética, la salud y las condiciones ambientales también pueden influir en los hábitos de muda.
Sphynx
El Sphynx es único. Conocido como el gato sin pelo, esta raza en realidad tiene un pelo fino y suave que apenas se nota. Si bien es posible que no pierdan pelo como otros gatos, su piel segrega aceite, lo que requiere una limpieza regular con un paño o incluso un baño periódico para mantener la limpieza.
Devon Rex
Cornish Rex
Al igual que el Devon Rex, el Cornish Rex tiene un pelaje crespo que muda menos que la mayoría de los gatos. La falta de pelos protectores contribuye a reducir la caída, pero aun así es necesario cepillarlos con regularidad para evitar los enredos.
Bengala
Siberiano
Pueden tener un pelaje largo y lujoso, pero los gatos siberianos son conocidos por su pelaje bajo en alérgenos. Tienen un pelaje triple que requiere un acicalamiento regular, pero que se desprende mucho menos que otras razas de pelo largo.
Azul ruso
Balinés
A pesar de su pelaje largo y sedoso, los gatos balineses son conocidos por mudar poco. Su pelaje de una sola capa no se vuelve mate con facilidad y cepillarlo varias veces a la semana puede ayudar a controlar la muda. Además, su pelaje produce menos alérgenos, lo que los convierte en una opción potencial para las personas con alergias. El gato javanés, derivado de la raza balinesa, tiene un pelaje similar y también se considera una raza de gato hipoalergénica.
Entender los hábitos de muda de razas de gatos específicas te ayudará a seleccionar el gato adecuado para tu hogar. Combinado con una nutrición adecuada, un acicalamiento regular y un entorno libre de estrés, puedes ayudar a tu gato a mantener un pelaje sano y, al mismo tiempo, minimizar el impacto de la caída de pelo en tu hogar.
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