¿Con qué frecuencia hay que alimentar a un cachorro?
No eres el único que se hace esta pregunta. Muchos nuevos padres de cachorros se preguntan con qué frecuencia hay que alimentar a un cachorro. La raza y el tamaño futuro de tu cachorro determinan sus necesidades nutricionales únicas. Como dueño de una mascota, es esencial proporcionarle una dieta equilibrada que incluya el equilibrio correcto de nutrientes. Les encamina hacia una edad adulta sana, favoreciendo tanto su crecimiento físico como su desarrollo cerebral. Repasar los aspectos básicos de la alimentación y nutrición de los cachorros te ayudará a cuidar mejor de tu nuevo cachorro.
Todo lo que debes saber sobre el desarrollo de tu cachorro
Los cachorros crecen de forma diferente según su raza y el tamaño que esta tendrá en la edad adulta. Pero todos los cachorros comparten etapas similares de desarrollo en sus primeros meses. Sus cuerpos están ocupados desarrollándose física y cognitivamente mientras aprenden las habilidades sociales que necesitarán en su nueva posición como perro de tu familia.
Durante todas las etapas de la vida del cachorro, la nutrición, el ejercicio y el sueño son esenciales para su salud física y mental.
De recién nacido a las 4 semanas, la etapa neonatal
Tu cachorro vino al mundo sin la capacidad de ver, oír u oler, dependiendo totalmente de su madre para todas sus necesidades físicas y nutricionales. Pasa la mayor parte del tiempo durmiendo, arrastrándose hacia su madre para alimentarse, calentarse y protegerse, utilizando únicamente sus sentidos del gusto y el tacto.
De la segunda a la cuarta semana comienza la transformación de cachorro indefenso a torpe. A medida que sus sentidos se desarrollan, sus ojos se abren, permitiéndoles ver su entorno. No ven bien hasta las ocho semanas, por lo que todo está borroso. También se les abrirán los conductos auditivos, lo que les permitirá oír. Tu cachorro utiliza estos nuevos sentidos para interactuar con su madre y sus compañeros de camada.
En la cuarta semana, tu cachorro ya puede caminar, pero estará torpe. Empieza a ladrar, a mover la cola y puede hacer sus necesidades de forma independiente. Durante este tiempo, le salen los dientes de leche. Los dientes de los cachorros son muy afilados y pueden resultar incómodos para su madre, por lo que esta iniciará el proceso de destete gradual.
Mientras los cachorros hacen la transición a los alimentos sólidos, la leche materna disminuye y los cachorros pierden la tolerancia a la lactosa. Entran en «la brecha de inmunidad», lo que significa que su sistema inmunitario no está lo bastante maduro para protegerles de las enfermedades, mientras que la inmunidad procedente del calostro disminuye. Las vacunas para cachorros les proporcionan parte de la protección que necesitan.
De 4 a 8 semanas, el cachorro intrépido
Durante este período, tu cachorro completará el destete y será un comedor independiente. Interactúa más con sus hermanos y su madre, iniciando la curva de aprendizaje de la etiqueta del cachorro, como la diferencia entre morder para hacer daño y morder para jugar.
A esta edad, los cachorros tienen un umbral de miedo alto: casi no tienen miedo. Es el momento de empezar a introducirles gradualmente, y con mucho refuerzo positivo, en distintos entornos, vistas, sonidos y personas. Ten cuidado al presentarles a otros animales sanos y amistosos, a menos que tu cachorro esté totalmente vacunado. La socialización es una parte crucial del desarrollo del cachorro.
A partir de las ocho semanas, tu cachorro es suficientemente maduro para ir con su familia definitiva.
De 8 a 12 semanas, tu pequeña esponja
Durante este período, el desarrollo del esqueleto trabaja duro para apoyar a tu cachorro en crecimiento. Los alimentos completos para cachorros que contienen cantidades adecuadas de calcio y fósforo favorecen el crecimiento del esqueleto. Los suplementos son innecesarios. Un suplemento hará más mal que bien si tu cachorro toma alimentos de calidad. Las razas grandes tienen necesidades nutricionales diferentes a las de las razas pequeñas, porque tienen más músculo y huesos más pesados y su período de crecimiento es más largo.
Tu cachorro será una esponja, deseosa de explorar nuevas experiencias. El entrenamiento con refuerzo positivo, montones de elogios y sabrosas golosinas aumentan la confianza y la sensación de seguridad de tu cachorro, lo cual es bueno porque el período de intrepidez no dura mucho. Al introducir una experiencia desconocida, observar antes de participar reduce el riesgo de que tu cachorro se asuste.
Alrededor de las 10 a 12 semanas, tu cachorro puede entrar en una fase de desarrollo temerosa o recelosa. Tampoco dura mucho, pero vigila a tu cachorro para detectar signos de miedo o ansiedad y prepárate para intervenir con habilidades reconfortantes de cuidador de mascotas.
Tu cachorro está formando vínculos sólidos con su gente, desarrollando una relación para toda la vida. La socialización del cachorro y el entrenamiento básico pueden empezar durante esta etapa de la vida.
De 12 a 24 semanas, el cachorro preadolescente
El esqueleto de tu cachorro aún se está desarrollando, por lo que necesita la cantidad correcta de calcio y fósforo. Demasiado calcio puede causar deformidades esqueléticas. Los alimentos completos de calidad para cachorros tienen la cantidad adecuada que necesitan.
Tu cachorro tiene mucho que averiguar sobre la vida en este momento. La etapa del miedo pasa a las diez semanas, y los cachorros se vuelven lo bastante curiosos como para explorar su entorno de forma más independiente. Están aprendiendo el orden jerárquico tanto de la familia como de otros animales domésticos. Los rasgos de personalidad se hacen evidentes.
Lo mejor de esta edad son las vocalizaciones de los cachorros. Tu cachorro pondrá a prueba sus habilidades ladradoras, emitiendo feroces gruñidos de cachorro y, si tienes suerte, ¡un aullido o dos! Por supuesto, esto puede variar según la raza.
Los dientes temporales o de leche se irán cayendo a medida que vayan saliendo los definitivos. Los juguetes y mordedores de diferentes texturas y los mordedores refrigerados pueden aliviar las molestias de la dentición y salvar tus objetos personales.
La socialización es esencial en este momento. Sacar a pasear a tu cachorro vacunado por el barrio es una buena oportunidad para que olisquee. Las interacciones controladas con otros perros vacunados, presentando una variedad de nuevas experiencias, vistas y sonidos, ayudan a estructurar un perro adulto seguro de sí mismo.
De 6 a 12 meses, el perro adolescente
Los cachorros adolescentes pondrán a prueba los límites e intentarán imponerse en la manada o la familia. Tienen un umbral de aburrimiento bajo y necesitan ejercicio mental y físico regular. El entrenamiento mediante el juego es una forma eficaz de enseñarles órdenes y habilidades básicas.
Tu cachorro alcanzará la madurez sexual durante esta etapa. Esterilizar o castrar a los cachorros cambia sus necesidades nutricionales. Los cachorros esterilizados necesitan menos energía (es decir, calorías) para mantener su peso correcto. Pide ayuda a tu veterinario si observas que tu cachorro está ganando peso en exceso.
A los siete meses, tu cachorro sigue desarrollando masa muscular y necesita proteínas de alta calidad y fácil digestión para favorecer ese desarrollo muscular.
A los 10 meses, las razas pequeñas se acercan a su tamaño adulto. Las razas más grandes alcanzan su tamaño adulto entre los 15 y los 24 meses. Las razas grandes cargan más su esqueleto debido al mayor tamaño de sus huesos y masa muscular. Deben seguir comiendo alimento para cachorros formulado para razas grandes, para mantener las articulaciones mientras se desarrolla la masa muscular.
Cuando tu cachorro haya alcanzado la edad adulta, aliméntalo con comida para adultos que mantenga su peso sin añadir exceso de calorías y satisfaga sus necesidades nutricionales a medida que envejece.
De recién nacido a las 4 semanas, la etapa neonatal
Tu cachorro vino al mundo sin la capacidad de ver, oír u oler, dependiendo totalmente de su madre para todas sus necesidades físicas y nutricionales. Pasa la mayor parte del tiempo durmiendo, arrastrándose hacia su madre para alimentarse, calentarse y protegerse, utilizando únicamente sus sentidos del gusto y el tacto.
De la segunda a la cuarta semana comienza la transformación de cachorro indefenso a torpe. A medida que sus sentidos se desarrollan, sus ojos se abren, permitiéndoles ver su entorno. No ven bien hasta las ocho semanas, por lo que todo está borroso. También se les abrirán los conductos auditivos, lo que les permitirá oír. Tu cachorro utiliza estos nuevos sentidos para interactuar con su madre y sus compañeros de camada.
En la cuarta semana, tu cachorro ya puede caminar, pero estará torpe. Empieza a ladrar, a mover la cola y puede hacer sus necesidades de forma independiente. Durante este tiempo, le salen los dientes de leche. Los dientes de los cachorros son muy afilados y pueden resultar incómodos para su madre, por lo que esta iniciará el proceso de destete gradual.
Mientras los cachorros hacen la transición a los alimentos sólidos, la leche materna disminuye y los cachorros pierden la tolerancia a la lactosa. Entran en «la brecha de inmunidad», lo que significa que su sistema inmunitario no está lo bastante maduro para protegerles de las enfermedades, mientras que la inmunidad procedente del calostro disminuye. Las vacunas para cachorros les proporcionan parte de la protección que necesitan.
De 4 a 8 semanas, el cachorro intrépido
Durante este período, tu cachorro completará el destete y será un comedor independiente. Interactúa más con sus hermanos y su madre, iniciando la curva de aprendizaje de la etiqueta del cachorro, como la diferencia entre morder para hacer daño y morder para jugar.
A esta edad, los cachorros tienen un umbral de miedo alto: casi no tienen miedo. Es el momento de empezar a introducirles gradualmente, y con mucho refuerzo positivo, en distintos entornos, vistas, sonidos y personas. Ten cuidado al presentarles a otros animales sanos y amistosos, a menos que tu cachorro esté totalmente vacunado. La socialización es una parte crucial del desarrollo del cachorro.
A partir de las ocho semanas, tu cachorro es suficientemente maduro para ir con su familia definitiva.
De 8 a 12 semanas, tu pequeña esponja
Durante este período, el desarrollo del esqueleto trabaja duro para apoyar a tu cachorro en crecimiento. Los alimentos completos para cachorros que contienen cantidades adecuadas de calcio y fósforo favorecen el crecimiento del esqueleto. Los suplementos son innecesarios. Un suplemento hará más mal que bien si tu cachorro toma alimentos de calidad. Las razas grandes tienen necesidades nutricionales diferentes a las de las razas pequeñas, porque tienen más músculo y huesos más pesados y su período de crecimiento es más largo.
Tu cachorro será una esponja, deseosa de explorar nuevas experiencias. El entrenamiento con refuerzo positivo, montones de elogios y sabrosas golosinas aumentan la confianza y la sensación de seguridad de tu cachorro, lo cual es bueno porque el período de intrepidez no dura mucho. Al introducir una experiencia desconocida, observar antes de participar reduce el riesgo de que tu cachorro se asuste.
Alrededor de las 10 a 12 semanas, tu cachorro puede entrar en una fase de desarrollo temerosa o recelosa. Tampoco dura mucho, pero vigila a tu cachorro para detectar signos de miedo o ansiedad y prepárate para intervenir con habilidades reconfortantes de cuidador de mascotas.
Tu cachorro está formando vínculos sólidos con su gente, desarrollando una relación para toda la vida. La socialización del cachorro y el entrenamiento básico pueden empezar durante esta etapa de la vida.
De 12 a 24 semanas, el cachorro preadolescente
El esqueleto de tu cachorro aún se está desarrollando, por lo que necesita la cantidad correcta de calcio y fósforo. Demasiado calcio puede causar deformidades esqueléticas. Los alimentos completos de calidad para cachorros tienen la cantidad adecuada que necesitan.
Tu cachorro tiene mucho que averiguar sobre la vida en este momento. La etapa del miedo pasa a las diez semanas, y los cachorros se vuelven lo bastante curiosos como para explorar su entorno de forma más independiente. Están aprendiendo el orden jerárquico tanto de la familia como de otros animales domésticos. Los rasgos de personalidad se hacen evidentes.
Lo mejor de esta edad son las vocalizaciones de los cachorros. Tu cachorro pondrá a prueba sus habilidades ladradoras, emitiendo feroces gruñidos de cachorro y, si tienes suerte, ¡un aullido o dos! Por supuesto, esto puede variar según la raza.
Los dientes temporales o de leche se irán cayendo a medida que vayan saliendo los definitivos. Los juguetes y mordedores de diferentes texturas y los mordedores refrigerados pueden aliviar las molestias de la dentición y salvar tus objetos personales.
La socialización es esencial en este momento. Sacar a pasear a tu cachorro vacunado por el barrio es una buena oportunidad para que olisquee. Las interacciones controladas con otros perros vacunados, presentando una variedad de nuevas experiencias, vistas y sonidos, ayudan a estructurar un perro adulto seguro de sí mismo.
De 6 a 12 meses, el perro adolescente
Los cachorros adolescentes pondrán a prueba los límites e intentarán imponerse en la manada o la familia. Tienen un umbral de aburrimiento bajo y necesitan ejercicio mental y físico regular. El entrenamiento mediante el juego es una forma eficaz de enseñarles órdenes y habilidades básicas.
Tu cachorro alcanzará la madurez sexual durante esta etapa. Esterilizar o castrar a los cachorros cambia sus necesidades nutricionales. Los cachorros esterilizados necesitan menos energía (es decir, calorías) para mantener su peso correcto. Pide ayuda a tu veterinario si observas que tu cachorro está ganando peso en exceso.
A los siete meses, tu cachorro sigue desarrollando masa muscular y necesita proteínas de alta calidad y fácil digestión para favorecer ese desarrollo muscular.
A los 10 meses, las razas pequeñas se acercan a su tamaño adulto. Las razas más grandes alcanzan su tamaño adulto entre los 15 y los 24 meses. Las razas grandes cargan más su esqueleto debido al mayor tamaño de sus huesos y masa muscular. Deben seguir comiendo alimento para cachorros formulado para razas grandes, para mantener las articulaciones mientras se desarrolla la masa muscular.
Cuando tu cachorro haya alcanzado la edad adulta, aliméntalo con comida para adultos que mantenga su peso sin añadir exceso de calorías y satisfaga sus necesidades nutricionales a medida que envejece.
¿Con qué frecuencia debes alimentar a tu cachorro?
De 6 a 12 semanas
Los cachorros de seis a doce semanas necesitan cuatro comidas diarias con una dieta diseñada para satisfacer sus necesidades nutricionales altamente específicas. La comida también debe estar adaptada a su tamaño.
De 3 a 6 meses
Los cachorros de tres a seis meses pueden pasar a dos comidas al día. Sus cuerpos regordetes están madurando, por lo que son más delgados. Si tu cachorro aún no ha perdido esa barriga de cachorro, mantén las raciones de cachorro hasta que su cuerpo madure.
Los métodos de entrenamiento basados en golosinas o recompensas requieren ajustar el tamaño de las raciones de comida para acomodar las calorías adicionales de las golosinas.
De 6 a 12 meses
Los cachorros de 6 a 12 meses pueden comer dos veces al día. Recuerda que la esterilización y castración cambian sus necesidades energéticas y puede ser necesario cambiar el alimento para cachorros por una dieta específicamente formulada para cachorros esterilizados. Tu veterinario puede aconsejarte sobre las raciones adecuadas para tu perro.
Un consejo importante sobre el tamaño de las raciones: la cantidad diaria recomendada por tu veterinario, o por el fabricante, debe repartirse entre todas las comidas diarias para evitar la sobrealimentación. Si utilizas golosinas para el entrenamiento, esas calorías deben deducirse de las raciones diarias de comida de tu cachorro.
Horario de alimentación del cachorro
Si no tienes certeza de los horarios típicos de alimentación de un cachorro, aquí tienes un ejemplo de un día de cuatro comidas:
6:00 a. m.
Despertar
6:30 a. m.
Paseo rápido/ejercicio
7:00 a. m.
Primera comida del día (observa el intervalo entre el paseo y la comida. Comer demasiado pronto puede provocar hinchazón en perros de razas grandes como los Retrievers y los Pastores alemanes. La distensión abdominal es una hinchazón repentina y potencialmente mortal del estómago de tu perro. Los síntomas son un vientre duro, notablemente hinchado y doloroso al tacto, vómitos improductivos, babeo, inquietud.
11:00 a. m.
Segunda comida del día
1:00 p.m.
Paseo/ejercicio por la tarde
4:00 p. m.
Tercera comida del día
7:00 p. m.
Paseo/ejercicio
9:00 p. m.
Última comida del día
6:00 a. m.
Despertar
6:30 a. m.
Paseo rápido/ejercicio
7:00 a. m.
Primera comida del día (observa el intervalo entre el paseo y la comida. Comer demasiado pronto puede provocar hinchazón en perros de razas grandes como los Retrievers y los Pastores alemanes. La distensión abdominal es una hinchazón repentina y potencialmente mortal del estómago de tu perro. Los síntomas son un vientre duro, notablemente hinchado y doloroso al tacto, vómitos improductivos, babeo, inquietud.
11:00 a. m.
Segunda comida del día
1:00 p.m.
Paseo/ejercicio por la tarde
4:00 p. m.
Tercera comida del día
7:00 p. m.
Paseo/ejercicio
9:00 p. m.
Última comida del día
¿Cuánto debes dar de comer a tu cachorro cada día?
Independientemente de su raza, los cachorros tienen diferentes tipos de cuerpo, metabolismos y necesidades nutricionales. Tu veterinario y la etiqueta del alimento para cachorros tienen sugerencias sobre la cantidad diaria que debes darle. Empieza con esas sugerencias y observa cómo se comporta tu cachorro. Su condición corporal debería ser el indicador de las necesidades de control de las raciones. Si notas un aumento de peso, puede que tu cachorro coma en exceso. Si está muy delgado, puede ser necesario aumentar su ración. Tu veterinario puede aconsejarte sobre la condición corporal de tu cachorro. Pesar a tu cachorro con regularidad y cotejar el resultado con las tablas de crecimiento te permitirá tener certeza de que va por buen camino.
Los métodos de entrenamiento basados en golosinas o recompensas requieren ajustar el tamaño de las raciones de comida para acomodar las calorías extra de las golosinas.
Rutinas y consejos para la alimentación del cachorro
- Alimenta a tu cachorro a la misma hora y en el mismo lugar todos los días. Elige una zona tranquila, alejada del tráfico diario de la casa, para que tu cachorro no tenga distracciones. Esto ayuda a desarrollar hábitos alimentarios saludables.
- No alimentes a tu cachorro nada más llegar a casa. Esta práctica puede contribuir a que la hora de comer se asocie con su alivio a tu vuelta. Tu llegada a casa es una magnífica oportunidad para reconectar con tu cachorro en lugar de ofrecerle una comida inmediata.
- Como siempre, habla con tu veterinario sobre las necesidades nutricionales específicas de tu cachorro si tienes alguna duda.
- Los suplementos son innecesarios si alimentas a tu perro con comida de calidad para cachorros y pueden causar más daños que beneficios.
- Si estás pensando en cambiar la comida a tu cachorro, habla primero con tu veterinario para determinar qué alimentos o necesidades nutricionales requiere tu cachorro. Luego haz la transición lentamente para evitar trastornos digestivos.
Programa de transición alimentaria
Habla con tu veterinario si tu perro tiene gases excesivos o heces blandas. Puede que tengas que cambiar los alimentos o el tamaño de las raciones.
Debe disponer siempre de agua fresca. El organismo de tu cachorro puede procesar todos los nutrientes que favorecen su rápido crecimiento cuando su cuerpo está bien hidratado.
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