Cómo ayudar a tu gato a perder peso
La obesidad es un problema crítico entre la población de gatos; por ejemplo, uno de cada cuatro gatos en el Reino Unido está considerado como obeso. Puede afectar gravemente a su esperanza de vida y a su salud en general, pero con el programa adecuado de pérdida de peso, entre un 80 % y un 90 % de los gatos logran su peso objetivo.
La dieta correcta para ayudar a tu gato a perder peso
Una dieta de pérdida de peso para tu gato se centra en tres principios generales: reducir la cantidad de calorías que ingieren, controlar la sensación de hambre y adaptar la cantidad de nutrientes esenciales para evitar deficiencias nutricionales Esto ayuda a garantizar que tu gato recibe una alimentación equilibrada, que se siente lleno y reduce significativamente el aporte energía.
Darle al gato menos cantidad de su alimento habitual no es una manera eficaz de hacer que pierda peso. En algunos casos, hasta puede resultar peligroso para el gato, ya que puede dejar de obtener la cantidad adecuada de los nutrientes esenciales.
En general, una dieta específica para la pérdida de peso debe incluir un aporte de proteínas más elevado que el alimento habitual del gato, para ayudar a mantener la masa muscular, un bajo contenido de grasa y un alto contenido de vitaminas y minerales. Esta dieta también puede aportar nutrientes activos que fomenten la movilidad saludable de las articulaciones, así como un buen estado de la piel y el pelo.
Las dietas veterinarias más recientes y avanzadas incluyen combinaciones de fibras específicas y fórmulas precisas para ayudar a mantener la sensación de saciedad del gato y, por lo tanto, reducir la probabilidad de que este pida comida, y logre perder peso.
Otra forma de ayudar al gato a perder peso es colocar abundante agua fresca en diferentes lugares de la casa. Así te asegurarás de que este beba lo suficiente para mejorar la digestión.
Cómo favorecer el comportamiento alimentario adecuado de tu gato
Para asegurarte de que tu gato pierda peso, es fundamental que le proporciones la cantidad de alimento que se recomienda en el envase, o las que te haya recomendado el veterinario, y que utilices una báscula de cocina para pesar la cantidad exacta. Aunque depende de la fórmula concreta, los alimentos secos para gatos pueden tener un alto contenido de energía y esto puede facilitar la que alimentes en exceso a tu mascota. Por esta razón, usar básculas y seguir las indicaciones es la mejor manera de lograr que un programa de pérdida de peso tenga éxito.
Si tu gato tiende a comer sin control y no regula la cantidad de alimento que toma, divide su ración diaria en comidas pequeñas y frecuentes para controlar la ingesta de energía. Del mismo modo, evita darle sobras de la mesa, ya que pueden aumentar significativamente su ingesta de calorías. Si quieres usar premios, estos deben contabilizarse como parte de la alimentación que recibe tu gato.
Tu veterinario podrá aconsejarte sobre el mejor ritmo de pérdida de peso para tu gato, que no debería ser demasiado rápido. Si esto ocurre, el organismo de tu gato puede interpretar que está desnutrido y esto puede provocar problemas hepáticos graves.
Cómo conseguir que tu gato haga ejercicio y pierda peso
Según el peso de tu gato, es posible que al principio le resulte difícil jugar. Sin embargo, si introduces los juegos en su rutina diaria poco a poco, le ayudarás a hacer ejercicio y a quemar el exceso de calorías.
Puedes estimular la actividad de tu gato si acondicionas tu casa para que pueda jugar. Ofrece a tu gato un árbol para trepar o un área con varios niveles donde pueda saltar y sentarse. También, juguetes con los que pueda divertirse mientras tú no estás: juguetes para el alimento con los que tu gato pueda conseguir la comida, divertidos y que fomenten sus instintos naturales de caza. Dos sesiones de juego de dos minutos al día son un buen comienzo para un gato con sobrepeso. Estas sesiones pueden aumentar poco a poco a medida que tu gato se vuelve más ágil.
Cómo mantener un peso saludable
Una vez que tu gato haya perdido peso, es fundamental ayudarlo a mantener un estilo de vida saludable para que no vuelva a su peso anterior. Esto se puede lograr si pesas a tu gato por lo menos cada seis meses. Si supera en más de un 5% su peso normal, puedes adaptar el método de alimentación y el alimento de tu gato a la nueva situación.
Cuando peses a tu gato durante el proceso de pérdida de peso, es importante que utilices siempre la misma báscula, para evitar discrepancias y errores que podrían hacer que tu gato se alimente en exceso o de forma insuficiente.
El programa de pérdida de peso adecuado hará que tu gato se sienta mucho más saludable y feliz. Habla con tu veterinario antes de empezar a hacer que tu gato adelgace, ya que te aconsejará sobre el peso al que debe llegar tu gato y la mejor dieta para lograrlo.
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